En química una disolución coloidal o dispersión coloidal es un sistema fisico-químico compuesto por dos fases: una continua, normalmente fluida, y otra dispersa en forma de partículas; por lo general sólidas, de tamaño mesoscópico (a medio camino entre los mundos macroscópico y microscópico). Así, se trata de partículas que no son apreciables a simple vista, pero mucho más grandes que cualquier molécula.
El plasma sanguíneo es un fluido coloidal de composición compleja.
Las disoluciones coloidales se pueden reconocer porque reflejan y refractan la luz que incide sobre ellas.
A continuación, vas a ver un vídeo de un espectacular experimento químico. Observarás como la disolución se hace azul como el cielo y la luz que llega al final se va oscureciendo y enrojeciendo como un atardecer. ¿Quieres saber por qué?
Como ya sabéis, la luz blanca se puede descomponer en todos los colores del arco iris, no obstante no todos los colores chocan y se dispersan, sino que hay una selectividad. Comienzan a dispersarse los colores violetas y azules, después los verdes y amarillos y finalmente los rojos (de mayor longitud de onda).